El verano de Inglés
Hola chicossss, me alegra mucho que
más personas estén leyendo mis relatos y me brinden su apoyo, crearé un twitter
para poder interactuar más con ustedes y poder avisarles en el momento en que
publique un nuevo relato. Espero que les guste mi relato de esta vez.
Había comenzado un nuevo año, era
verano del 2018 aquí en Perú y estaba tranquila en mi cuarto charlando con
Melissa sobre qué haríamos para pasar el rato en las vacaciones, cuando mi mamá
nos llama a ambas a la sala. Resulta que mi mamá y la mamá de Melissa también
habían estado decidiendo sobre en qué invertir nuestro tiempo de vacaciones,
solo que ellas tenían una idea completamente distinta a la nuestra.
En la entrega de notas del año
anterior, nuestro curso más bajo fue el de inglés, en parte porque en esos
momentos no dominaba mucho el idioma y que la profesora era bastante exigente
con la pronunciación, así que preocupadas por esto nuestras mamás decidieron
inscribirnos juntas en el ciclo de verano del Británico. La idea en sí al
inicio no me generaba ningún entusiasmo, ya que significaba tener que estar encerrada
en un salón con el calor del verano y prestando atención a un profesor en lugar
de estar afuera en el aire libre disfrutando del verano. Sin embargo Melissa estaba
pensando más allá del salón de clase. Cuando volvimos a mi cuarto empezó a
comentarme lo que yo no había considerado.
M: Mira Dani, no solo pienses en las
clases y lo aburridas que estaremos.
D: Es lo único que se me ocurre
M: ¡Es que solamente estás pensando en
eso!- Decía Melissa mientras sonreía como loca, pareciera como si le hubieran
dado el mejor obsequio del mundo.- En primer lugar para llegar al Británico
podremos decirles que nosotras queremos ir solas, así podremos pasear y conocer
más lugares en el camino.
Ciertamente tenía un punto, el
trayecto al Británico. Desde mi casa no era tan lejos, por lo que no supondría
un problema al momento de pedir que nosotras solas nos movilicemos.
M: Y otra cosa, es que podremos
conocer gente nueva y a lo mejor nos invitan a varios lugares. - Esa última no
la veía muy probable, ya que por lo general suelo ser bastante reservada en
público, sobre todo al inicio de conocer a las personas, pero verla
entusiasmada planeando cómo hablarles a los chicos, y a donde ir, impidieron
que me mostrara en contra de sus ideas.
D: Ok ok, espero todo resulte como tú
dices.
M: Ya vas a ver que sí, tú confía.
Y así fue, decidí confiar en ella.
Fuimos con nuestras madres para comentarles sobre el asunto de ir solas hasta
el Británico. Al principio se mostraron un poco desconfiadas, sobre todo mi
mamá, pero luego de conversar con ellas y prometerles que les haríamos saber a través
del celular si ya habíamos llegado y si ya salíamos, accedieron a dejarnos ir
solas. Las clases empezaban la semana próxima, en ese tiempo compramos los
libros y veíamos la ruta que debíamos seguir para llegar. Notamos que había un
parque de camino donde podríamos pasar el rato y descansar de vez en cuando.
Finalmente llegó el primer día, las
clases empezaban a las 11 am, por lo que tenía que despertarme temprano para
alistarme, desayunar y encontrarme con Melissa en aquel parque que habíamos
visto. Como hacía calor, me di una ducha rápida y me vestí con un short y un
polo medio largo, mi ropa interior de color blanca y unas zapatillas del mismo
color; desayuné con mis papás y finalmente me puse en marcha hacia el parque,
donde vi que Melissa ya me estaba esperando. Me comentó que había visto a
varios chicos pasar en dirección al Británico, algunos un poco mayores que
nosotras, y que en su mayoría estaban bastante atractivos.
Melissa había vuelto a su soltería
hace algunos días, así que estaba preparada para explorar nuevos terrenos y
tener nuevas conquistas; yo por mi parte solo quería estar tranquila y
disfrutar aunque sea un poco el verano, además que hablaba algunas noches con
Jorge, y de vez en cuando, teníamos nuestras video-llamadas calientes. Luego de
conversar unos momentos nos dirigimos hacia el Británico.
Al llegar nos indicaron en donde
estaba el salón al que teníamos que ir. Al entrar vimos que el salón estaba
casi lleno, algunos estaban solos y otros chicos y chicas parecían que se conocían
o no tenían problema en conocerse. Melissa y yo nos sentamos al medio pero no
hablamos con nadie porque nos sentíamos algo intimidadas.
Así fue la primera semana de clases,
hasta ese momento no habíamos logrado nada de lo que Melissa se había
propuesto, únicamente el poder salir solas, pero eso cambió cuando la profesora
nos indicó que haríamos una actividad grupal de 5 personas.
M: "Esta es nuestra oportunidad
para conocer gente".- Me susurró emocionada
La profesora eligió los grupos y nos
tocó con una chica que se llamaba Ariana y dos chicos que eran Sebastián y
Gonzalo. Ariana era una chica delgada, cabello rojizo, hermosos ojos y un poco
alta, ella era un par de años mayor que nosotras. Gonzalo era su hermano mayor,
era alto, su cabello era castaño y tenía un cuerpo muy bien trabajado, yo había
quedado embobada con él desde el primer día de clases y no me esperaba que
fueramos a terminar en el mismo grupo, por lo que estaba muy nerviosa. Finalmente
estaba Sebastián, era un poco más bajo que Gonzalo pero seguía siendo alto,
tenía tambien la misma edad que él y su cabello era medio lacio y de color
negro, al contrario que Gonzalo no tenía mucho músculo, pero lo compensaba con
su sentido del humor y amabilidad. Nos llevamos bien desde el primer momento, y
cuando terminamos la actividad seguimos conversando. Melissa hablaba bastante y
proponía temas para que habláramos todo el grupo y así poder ir conociéndonos
poco a poco. Tras terminar las clases del día nos dirigimos al parque, donde
Gonzalo se saludó con otro amigo suyo que se llamaba Javier, quien estaba en
otro salón. Él era un chico igual de alto que Gonzalo y tambien tenía un buen
cuerpo. Melissa se acercó a saludarlo y entablaron una conversación bastante
activa y no paraban de reírse, era claro que ella ya había fijado su víctima y
además parecía que Javier iba con la misma idea. Intercambiamos números y nos
fuimos en dirección a nuestras casas.
En el camino Melissa y yo cinversábamos
sobre lo que había pasado.
M: ¡¡YO SABÍAAA!! ¡¡TE DIJE QUE
ENCONTRARÍAMOS CHICOS CHURRÍSIMOS!!
D: Jajaja, ayyy, yaya está bien tenías
razón.
Estabamos muy animadas por haber
conocido gente nueva, los días en el Británico se hacían cada vez más
soportables, nos sentábamos juntos para conversar y pasar el rato en los
recesos y no había día en que Gonzalo no aprovechara para fastidiarme
haciéndome cosquillas o a veces cuando se sentaba atrás de mí, me hacía una
presión con sus nudillos en la espalda, que hacía que sintiera un corrientazo
por toda la espalda; aun así nos llevábamos bien y nos teníamos confianza. Pero
con el que más me hablaba era con Sebastián, solo que era mayormente por el
whatsapp, era algo tímido para conversar en persona pero a través del chat era
bastante divertido y me gustaba mucho hablar con él. Con Ariana conversábamos
sobre cosas de chicas y nos daba concejos para combinar ropa y maquillaje,
además de algunos secretos de chicos, pero esos temas los hablaba más con
Melissa que conmigo.
Por otro lado cada vez que terminaban
las clases Javier estaba esperándonos en la puerta, aunque más que esperarnos a
nosotros esperaba a Melissa, con quien solía conversar más.
Así fueron avanzando los días hasta
llegar a las últimas semanas del Británico. En esos momentos ya casi no me
escribía con Jorge, sino que solía quedarme conversando con Sebastián o
Gonzalo, este último me escribía a horas de la madrugada, no me molestaba ya
que no tenía sueño y me podía quedar conversando con alguien, porque Sebastián
solía dormirse a eso de las 11 de la noche, y entre más me escribía con él nos íbamos
tomando mayor confianza, llegando al punto de que un día empezamos con el clásico
juego de Verdad o Reto.
Al inicio eran cosas bastante leves,
para no aparentar que habían otras intenciones, pero poco a poco iba subiendo
la temperatura, de una manera algo discreta.
G: JAJAJA, bueno te toca, V o R?
D: Hmmmmm, verdad
G: A verrr. Qué fue lo primero en lo
que te fijaste cuando me viste por primera vez?
D: Jajajaja, hmmmm pues que tenías
buen cuerpo jajaja.
G: ¿Ah, sí? ¿Y cómo qué buen cuerpo? -
Se hacía el desentendido pero sabía que era un juego, un juego que me estaba
gustando jugar.
D: Ayyy jajaja o sea que tenías el
cuerpo bien marcado jajaja. Bueno te toca, V o R?
G: Verdad.
D: ¿Que chica se te hace la más
atractiva del salón? y no vale decir que es tu hermana jajaja.
G: Jajaja, tampoco lo diría.
Obviamente la más atractiva eres tú. - Eso me hizo emocionar un poco, pero
quise jugar a hacerme la difícil.
D: Uy sí, claaaro jajajaja.
G: Es la verdad.
D: ¿Y por qué piensas eso?
G: Creo que tendrás que esperar a que
vuelva a decir verdad para que me preguntes eso.- Me tenía donde quería, estaba
jugando su juego, uno en el que me haría acumular ganas hasta el final.- Te
toca, V o R?
D: Reto.
G: Te reto a contarme tu mayor secreto.
D: No, no, eso no.- No podía decirle
lo que había pasado con Jorge, pero me daba curiosidad saber qué pasaría si lo
hacía.
G: ¿Tan malo es? jaja
D: Son cosas privadas, no lo sabe ni
Melissa.
G: Vaya, así de secreto, ¿te metiste
con alguien que no debías? jajaja.- Trataba de sacarme la información de a
pocos
D: Algo así...
G: ¿Con su novio?
D: Jajaja nooo, y ya te dije que no te
diré. Te toca, ¿V o R?
G: Reto
D: Te reto a decirme porque te parezco
atractiva jajaja
G: Jajaja, que hábil. Es algo que no
se ve a simple vista.
D: ¿A que te refieres?
G: Sí, es como si la Daniela que va al
Británico fuera una fachada, que en el fondo guardas a alguien más atrevida.
Eso es lo que atrae, pensar que tras esa carita inocente, tras esa ropa
discreta, se esconde una chica muy atrevida, dispuesta a muchas cosas.- No pude
evitar morderme el labio de excitación, había logrado leerme por completo, la
calentura de esa descripción hizo que mi mano bajara a acariciar mis pechos.
D: ¿Y por qué crees que estaría
dispuesta?-Pregunté para que la situación fuera más caliente.
G: Porque ya me lo confirmaste, cuando
no quisiste decirme tu mayor secreto. Algo atrevido debió ser.- Mis manos
bajaban hasta mi coño recordando todo lo que había aprendido con Jorge, ya había
pasado bastante tiempo desde la última vez que me había masturbado.- Te toca, ¿V
o R?
D: Verdad jajaja.- Mis dedos ya se
habían metido bajo mi short de pijama y acariciaba mi coño sobre mis bragas
suavemente, generándome un poco de placer.
G: ¿Como reaccionarías si te mandara
una foto mía?- El imaginar una foto de su verga me puso más excitada de lo que
ya estaba y mis caricias cada vez eran más placenteras.
D: Depende de lo que me mandaras.-
Dije a manera de incitarlo.
Pasaron unos minutos hasta que me
llegó una foto de su torso descubierto, podía ver su cuerpo fuerte y marcado,
que ocasionaron que metiera mis dedos bajo mi ropa interior.
G: Ya que me dijiste que te fijaste en
mis músculos quise que los vieras mejor, ahora me voy a dormir, descansa
hermosa.
D: Descansa.
Tras eso volví a ver la foto, baje mi
short hasta las rodillas y comencé a masturbarme con mayor intensidad.
D: Ufffff.... Hmmmm.... - Mis gemidos
eran cada vez más notorios y mi cabeza imaginaba a Gonzalo completamente
desnudo, tocándome, acariciándome, haciándome desear más placer que no sentía
desde hace semanas.
D: ¡¡¡Ahhh!!! ¡¡Másss!! ¡¡¡HMMMMMM!!!
Me coloqué boca abajo, poniendo mi
cara contra la almohada para evitar que mis gemidos sonaran tan fuerte y
levanté mi culo, como si él estuviera detrás de mí y yo se lo estuviera
ofreciendo.- ¡¡¡¡HMMMM!!!! ¡¡¡¡AHMMMM!!!! ¡¡NO....NO PARES!!... ¡¡AHHHMMMMM!!
Quité mi mano de mi coño y empecé a
acariciar mi trasero, me daba leves nalgadas y lo estiraba, lo abría,
imaginando que lo hacía para él. Me sentía cada vez más caliente. Las palabras
de "niña buena" y "atrevida" resonaban fuertemente en mí,
me hacían sentir demasiado bien. Acerqué mi mano a mi coño desde atrás,
metiendo por primera vez uno de mis dedos; se sentía húmedo, caliente y muy
placentero, mientras que mi otra mano se colocó bajo mis pechos, empezando a masajearlos
de manera cada vez más fuerte.
D: ¡¡¡AHHHH!!! ¡¡¡MÁÁÁSSSSS!!! ¡¡¡MÁS
RÁPIDOOO!!! ¡¡¡¡HMMMMM!!!! ¡¡SÍÍÍÍ!!-
Cada vez iba acelerando más, metiendo
y sacando mi dedo más rápido, haciéndome alcanzar el orgasmo.-
¡¡¡HMMM!!! ¡¡¡¡¡¡¡AHHHH.....AHHHHHHHHMMMMMMMM!!!!!!!
Tuve que morder fuertemente la
almohada, había hecho demasiada bulla y mis sabanas estaban muy mojadas, llevé
mi dedo a mi boca y empecé a saborearlo. Me gustaba el sabor, así que pasaba
mis dedos por mi coño para sacar más de mis jugos y llevarlos a mi boca hasta
que fui sintiendo que me dormía. Me puse mi ropa, que tambien se sentía mojada,
me tapé y caí dormida hasta la mañana siguiente, donde las cosas se pusieron
cada vez más interesantes.
Comentarios
Publicar un comentario